El Gobierno envía misión a Brasil por el futuro de la relación y el Mercosur
Faltando pocos días para que Macri asuma la conducción del bloque, hay incertidumbre sobre qué hacer en la negociación con Europa y la flexibilización de reglas internas
El ministro de Relaciones Exteriores, Jorge Faurie, se reunirá mañana con sus pares del Brasil, Paraguay y el Uruguay para concertar una agenda de trabajo al interior del Mercosur, que la Argentina presidirá desde el 18 de diciembre próximo, cuando se realice en Montevideo el traspaso de mando y al cual se espera que asista el presidente Mauricio Macri.
Este jueves, Faurie y el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, mantendrán además una serie de reuniones de trabajo con sus contrapartes brasileñas para analizar el estado de las relaciones económicas de modo de trazar un escenario más claro de la política macroeconómica del principal socio y tener un panorama más claro de la relación que el nuevo gobierno pretende tener con terceros.
Faurie visitará Brasilia junto a sus colegas para ultimar los detalles de la Cumbre de Líderes de la unión aduanera, pero también para trazar un horizonte en la negociación que el bloque mantiene con la Unión Europea (UE) desde hace casi 20 años y que no muestra fin a corto plazo, en parte por la imprevisibilidad que levanta la inminente asunción de Jair Bolsonaro al frente del Brasil. La próxima semana habrá en Montevideo reuniones a nivel técnico y político para evaluar el estado de situación del acuerdo birregional.
En rueda de prensa desde la Casa de Gobierno, el canciller confirmó su visita al Brasil y el viaje del presidente Macri a su capital, el próximo 1 de enero, para la toma de posesión de Bolsonaro, en lo que se espera que sea el primer encuentro mano a mano de ambos mandatarios.
En la Cumbre de Líderes del G20, la negociación con la UE volvió a escena a partir de las declaraciones del presidente de Francia, Emmanuel Macron, quien dijo que ve díficil poder firmar un acuerdo si acaso Bolsonaro denuncia el Acuerdo de París y retira a la primera economía de la región de ese pacto contra el calentamiento global. Para calmar los ánimos, el mandatario saliente, Michel Temer, dijo que cree improbable que su país pegue el portazo.
Según Faurie, en las reuniones bilaterales con mandatarios europeos (Ángela Merkel de Alemana, Macron de Francia, Giuseppe Conte de Italia y Theresa May, del Reino Unido) "se conversó en detalle lo que falta para cerrar el acuerdo". El diplomático dijo que "hay que hacer un esfuerzo técnico particular porque (esta negociación) sucede en medio de la transición en Brasil", lo cual "nos obliga a un ejercicio para saber hasta dónde se puede llegar y cómo retomamos, si fuera el caso, desde enero".
Habiendo cedido la conducción del G20, Macri asumirá la presidencia pro tempore del Mercosur durante una reunión en Montevideo en dos semanas. A tal cumbre, de momento, no se espera la asistencia de Bolsonaro, según fuentes diplomáticas y del equipo de transición del ex capitán del Ejército.
El mayor desafío para la presidencia semestral argentina será la de mostrar avances en las negociaciones abiertas a la vez que muestra cintura con los primeros pasos de Bolsonaro en el poder. Para ello, el Gobierno ya dio a entender que podría flexibilizarse el bloque para permitir negociaciones de preferencias arancelarias a nivel bilateral, lo cual podría beneficiar a cada miembro en alguna de las conversaciones abiertas en particular, pero debilitaría al conjunto frente a bloques o países con posiciones más sólidas.