Cambia el mundo | El agua ya no es potable en ninguna parte del mundo por la contaminación: y aparece una nueva amenaza a la salud
Un reciente informe demostró que el agua de lluvia ya no es potable en ninguna parte de la Tierra.
El agua de lluvia, una fuente natural históricamente considerada segura para el consumo humano, ya no es potable en ninguna parte del mundo, según un reciente estudio publicado en la revista Environmental Science & Technology.
La investigación liderada por científicos de la Universidad de Estocolmo ha revelado que la contaminación por sustancias químicas permanentes representa una amenaza global para la salud.
El impacto de las "sustancias químicas eternas" en el agua de lluvia
El estudio identifica a las sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS) como las principales responsables de la contaminación del agua de lluvia en todo el planeta. Estas sustancias, conocidas como "químicos eternos", son compuestos altamente resistentes a la descomposición y tienen la capacidad de acumularse en el medio ambiente, en los animales y en los seres humanos.
Los PFAS están presentes en una amplia variedad de productos de uso cotidiano, como:
- Envases de alimentos.
- Ropa impermeable.
- Muebles y alfombras.
- Ollas y sartenes con revestimientos antiadherentes.
- Espumas extintoras.
- Electrónica y algunos cosméticos.
Estos químicos se liberan al aire durante su producción y uso, y eventualmente se filtran al agua de los océanos o se dispersan en la atmósfera, regresando al suelo y los cuerpos de agua a través de la lluvia.
¿Por qué el agua de lluvia ya no es potable y es riesgosa para la salud?
Los científicos evalúan los niveles de PFAS en el agua de lluvia y el suelo en diferentes partes del mundo y los comparan con los límites establecidos por organismos reguladores como la Agencia de Protección del Medio Ambiente (EPA) de Estados Unidos. Los resultados muestran que los niveles de PFAS superan ampliamente los límites considerados seguros .
Ian Cousins, profesor del Departamento de Ciencias Ambientales de la Universidad de Estocolmo y autor principal del estudio, afirmó: "Basándonos en las últimas directrices de EE.UU. sobre el PFOA en el agua potable, el agua de lluvia de todo el mundo se consideraría no apta para el consumo".
Aunque en muchos países industrializados no se consume directamente agua de lluvia, en diversas regiones del mundo esta es una fuente vital de agua potable, especialmente en comunidades rurales o aisladas.
Los riesgos del agua de lluvia para la salud
La exposición prolongada a los PFAS está asociada con graves problemas de salud, entre ellos:
- Cáncer.
- Reducción de la fertilidad.
- Colesterol alto.
- Disminución en la respuesta a las vacunas.
- Problemas en el desarrollo infantil.
Además, los científicos advierten que, al igual que los microplásticos, los efectos a largo plazo de los PFAS en la salud humana son difíciles de prevenir, debido a la diversidad de sus impactos y su persistencia en el organismo y el medio ambiente.
El informe también señala que el suelo del planeta está contaminado de forma generalizada con estas sustancias químicas. Debido a su capacidad para circular eficazmente entre los océanos, la atmósfera y la tierra, los niveles de PFAS seguirán siendo peligrosamente altos durante décadas, incluso si se dejan de producir inmediatamente.
Este hallazgo subraya un desafío global urgente: reducir la producción y uso de PFAS en industrias y encontrar soluciones para mitigar su impacto en el medio ambiente y la salud humana.