Las figuritas del Mundial, un fenómeno de culto que sobrevive a la era digital

El Album FIFA 2014 es un boom de ventas mundial. Un multimillonario negocio que se mantiene vigente a pesar de los avances tecnológicos. En Argentina, y en toda América Latina, sus ventas superan las registradas para la misma época del Mundial pasado. Ahora, el canje de repetidas también se hace por las redes sociales

Figuritas del Mundial? No quedan. Vení mañana. La respuesta se repite en los kioscos porteños y es una muestra del furor que generó en los chicos y en grandes con nostalgia completar el clásico álbum de figuritas del Mundial de Fútbol. Cuando parece que para los chicos no hay mucho más allá de la PlayStation, las tablets o las redes sociales, el renovado éxito de las figus comprueba que la era digital todavía no arrasó con los viejos juegos de la infancia.
Es un boom de ventas que nos sorprendió. Hay un poco de demora por la gran demanda, pero estamos abasteciendo bien. En comparación con otras figuritas que estamos vendiendo, como las de One Direction que se venden muy bien, la relación con las del Mundial es de 10 a 1 y más, comentó el propietario de La Golosinería, un mayorista que abastece a los kioscos.
El Album del Mundial de la FIFA es un fenómeno de culto y un multimillonario negocio para Panini Group, una compañía italiana que imprime figuritas desde el Mundial de México 1970. En 2012, la empresa facturó u$s 825 millones con ventas en 110 países.
Es difícil estimar la venta, porque todavía en esta etapa hay muchos chicos que se están sumando a la colección. Este año hay mucho ruido porque, a diferencia de otros mundiales, creció el público adulto que colecciona. Trabajamos muy contrademanda para cumplir con todos los pedidos, nos van pidiendo diariamente y no tuvimos desabastecimiento hasta ahora, explicó Nicolás Sallustro, uno de los responsables de la filial argentina. La empresa italiana cuenta con una planta propia en Buenos Aires, además de sus fábricas en Módena y San Pablo.
El álbum, que tiene una única edición internacional, suma 639 figuritas. Para completarlo, en una situación ideal, se deben comprar 128 sobres cada uno trae cinco figuritas y cuesta $ 5 lo que tiene un costo de $ 640. Sin embargo, las repetidas hacen que el costo pueda duplicarse. El tradicional canje de figuritas hoy no sólo se da en los patios de las escuelas el nola y el late siguen vigentes sino también en las oficinas, en Facebook y otras redes sociales, y en los parques Centenario y Rivadavia, entre otros puntos de encuentro. La de Lionel Messi es la más buscada, claro. Pero aunque los chicos siguen hablando de la difícil, Sallustro aclara que se trata de un mito: Cuando hacemos la mezcla, ponemos la misma cantidad de todos los jugadores, del más famoso hasta el menos.
El fenómeno 2014 de las figuritas es global: en Brasil aseguran que este Mundial batirá récords para la empresa de Módena. Es una fiebre. Todos los mercados de América Latina están vendiendo por encima del mismo período del Mundial pasado, señaló a la agencia Reuters, José Eduardo Martins, presidente de Panini Brasil.
Brasil es el mayor mercado global de Panini. En esta época, su fábrica ubicada al Norte de San Pablo trabaja las 24 horas del día. Allí se mezclan y empaquetan unos ocho millones de sobres por día, con un sistema de ensobrado automático diseñado por Umberto Panini. El 75% de la producción se queda en Brasil, donde cada sobre cuesta 1 real ($ 3,59). El resto es despachado a los demás países de América Latina, excepto la Argentina que desde 2009 se abastece con su propia producción.
El negocio de las figuritas también revela las distorsiones económicas en la región: en la mayor parte de los países un sobre de figuritas cuesta el equivalente a entre 40 y 60 centavos de dólar, pero en Venezuela la inflación y los controles de cambio dispararon el precio a u$s 8.

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