En la última década cultivar maíz y trigo se encareció casi 200%

La Argentina se convirtió durante los últimos años en un referente en el negocio de la soja. Sin embargo, hubo otra época en donde era conocida como uno de los mayores productores de trigo y maíz, imagen que se diluyó de la mano de un crecimiento en los costos de producción.

El informe semanal de GEA Guía Estratégica para el Agro de la Bolsa de Cereales de Rosario, explica que esto podría ser consecuencia de los elevados rindes del maíz en la zona núcleo, que sólo se cubrirían con planteos de alta tecnología en lotes de buen potencial, y en el mejor de los escenarios productivos.

Entre 2003 y 2014, los insumos y costos mostraron aumentos en sus precios en dólares muy superiores al del precio esperado en la cosecha para la tonelada de maíz. En estos casos se dieron alzas de entre el 111% y el 193% interanual, medidos en dólares, contra un 100% que creció el precio a cobrar por la semilla en el mismo lapso.

Así, ítems como labores y fletes registran fuertes aumentos, perjudicando al maíz que se cosecha en zonas alejadas de los puertos. El caso del trigo no es diferente, ya que los estudios de la BCR también muestra un crecimiento de 100% del precio para abril de 2015 respecto de 2003, pero con un crecimiento de los insumos y costos del orden del 122% al 175%, interanual, medidos en dólares.

El trabajo señala que un hecho preocupante para la actividad maicera y sus derivados: la caída en la intención de siembra, ya que para esta campaña se observa una caída de 24% de la superficie de maíz de primera y un 13% menos del tardío, con respecto al ciclo anterior, en la denominada zona núcleo.

A la hora de señalar razones para esta caída, la entidad rosarina destaca que por costos, prevalece la opción de hacer soja en vez de maíz y que en los campos arrendados, sólo se produciría maíz para cumplir con los contratos de alquiler.

Por otro lado, el trabajo que realizaron los ingenieros agrónomos de GEA, Sofía Corina y Cristian Russo, señala al alquiler, los aumentos del precio del gasoil, y su efecto sobre los fletes, como los puntos determinantes en la estructura de costos de la nueva campaña.

Una posible salida que pueden encontrar los productores de trigo y maíz podría llegar del tipo de cambio. Así lo explica el informe mensual poniendo como ejemplo que si alguien vendiera hoy su futura producción de maíz a u$s 140 la tonelada a entregar en Abril 2015, el dólar que podría percibir en esa fecha podría alcanzar los $ 10,195 por dólar; conforme la cotización del dólar futuro ROFEX para ese mes. Once años atrás, si en agosto de 2003 se vendía anticipadamente la producción a u$s 70 la tonelada para entregarla en abril de 2004, el dólar que se esperaba a la fecha de cosecha era de $ 3,08 por dólar. Entre los 10,195 $/dólar de hoy y los 3,08 $/dólar de hace 11 años, hay un incremento del 231 por ciento. La devaluación del peso equilibra los aumentos en dólares que han tenido los insumos, los fletes, el alquiler y las labores en la siembra de maíz.