Arrancó con fuertes ventas el mercado mundial del arte

Se ofrecieron 87 obras escogidas y se vendieron 69 (un 79% de lo ofrecido). El monto total fue de u$s 210 millones con un promedio de u$s 3 millones por obra

Este año 2011 estará signado por la competencia entre Sothebys y Christies por ser los líderes del mercado de subastas en el mundo.
Generalmente las ventas son muy parejas y es curioso ver como lo ofrecido por cada una de ellas es muy similar a la de la otra.
No tienen mucho interés en diferenciarse, sólo en superarse. Chiristies sacó buena ventaja el año pasado cuando vendió más de 5.000 millones de dólares aprovechando que no es una empresa pública y puede manejar con más facilidad las negociaciones tanto con los compradores como los vendedores, en cambio Sothebys que ya ha sufrido multas por hacer cosas que no puede, es una empresa que cotiza en bolsa, y debe tener más formalidad en sus actuaciones.
Febrero y Londres es un buen momento para ver cómo viene la tendencia del mercado. Se ofrecieron 87 obras escogidas y se vendieron 69 (un 79% de lo ofrecido). El monto total fue de u$s 210 millones con un promedio de tres millones por obra (una locura). Como siempre el Rey de las ventas es el malagueño Pablo Ruiz Picasso (es curioso que usara el apellido de su madre, como también lo hacia Diego de Silva y Velásquez). Dieciocho de las obras ofrecidas eran de su autoría (20%) y se vendieron 13 en 70 millones (el 33% de lo facturado). Sothebys superó a su rival en u$s 11 millones de venta ya que contó con la obra más valiosa, que era un retrato de María Teresa Walter una joven que convivió con Picasso unos años y que duplicó su estimación al venderse en 41 millones de dólares, para muchos era más bello el retrato de otra de sus mujeres, la rusa Olga que se pagó u$s 2,8 millones y que estaba realizado en 1.923 y medía tan solo 27x22cm. Sin duda era la joya del remate junto a otra pequeña témpera del creativo Rene Magritte, que muchos conocen por la película El Affaire de Tomas Crown. Este surrealista y de buen humor belga de quién hay ahora un lindísimo museo en Bruselas, realizó varios personajes con Bombin bien británico que se han convertido en un ícono de sus obras. La más ofrecida lo ve a su personaje de espaldas y con un luna creciente en el firmamento, mide tan solo 33x25cm., y varios pujaron por ella hasta que llegó a u$s 4 millones, sin duda el mejor precio del remate. Un gran escultor italiano, Marino Marini, comienza a ser demandado por todos, aparte de su museo en Milán, hay otro muy interesante en Florencia, que es una iglesia desafectada al culto y hoy museo muy poco conocido. Su escultura más famosa está en la terraza del Palazzo que sobre el Gran canal en Venecia fuera la casa de Peggy Gughenheim, un niño sobre un geométrico caballo y es ya un símbolo no sólo del museo sino de la ciudad. Otra similar podemos verla en el Museo Nacional de Bellas Artes en Buenos Aires. Y en Londres se ha pagado 6,7 millones de dólares, por una similar a las antes nombradas, es una de la cual hay cuatro bronces y la vendida estaba no sólo patinado el bronce por el artista sino también policromado con pintura al óleo, curiosamente tanto le gustó el resultado de esta obra al artista que al año siguiente en 1956 hizo otra igual pero tallada en madera, y ya había realizado otra en poliéster que hoy podemos disfrutarla en el Museo del Vaticano.
De las obras de Heri Moore como es normal en toda la escultura moderna casi siempre hay diez bronces de cada obra realizada por el escultor. Hoy sus características obras de unos dos metros de largo se están pagando un promedio de u$s 3 millones como ocurrió con las dos ofrecidas en Londres. Sin duda, que el siglo XXI viene signado con el despegue definitivo de los valores de la escultura que siempre han estado relegados con relación a la pintura. De Claude Monet se vendió un lindo paisaje marítimo en u$s 5,5 millones, quizás valga menos, pero el encontrado en Avellaneda esta semana que pertenece a una disputa de separación de bienes de una pareja que ya no vive junta hace doce años, es también una lindísima obra de Monet y de la calidad de los que se encuentran en los Museos. En Christies se destacaban un Bonnard que trepó a inesperados u$s 11,6 millones, un Andre Derain del período fauvista de 1905 que logro u$s 9,5 millones y un típico pastel de Degas que alcanzó u$s 8,7 millones. Vendieron también 8 Picassos en 17 millones. Mercado demandante, bases muy altas, seguramente garantías de venta por parte de los rematadores y un mercado en alza, ahora vendrán los remates de arte moderno y también se repetirá la historia. En Buenos Aires los compradores en el verano son los extranjeros, los locales recién se movilizan a partir de abril. Quizás sea una buena estrategia recorrer las galerías de arte y aprovechar esta circunstancia.
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