Pelea publicitaria

La guerra de las cervezas llegó a la Selección: la "picante" respuesta de Schneider a Quilmes

Después del esperado spot de Quilmes, el sponsor oficial de la Albiceleste contraatacó con una "coincidencia" particular. El antecedente de Isenbeck vs Quilmes en 2002

El nuevo frente de batalla de las dos cerveceras más importantes del país no está en las góndolas ni la heladera, sino que se encuentra en el mundo de la publicidad. Tras el debut del spot "Coincidencias" de Cervecería Quilmes, ex "hincha oficial" de la Selección, llegó al respuesta por parte de Schneider, la etiqueta con la que CCU se convirtió en sponsor de la Albiceleste desde 2019. La última guerra que se libró en la pantalla (por entonces) chica terminó en un conflicto dirimido en la Justicia.

"Después de más de 20 años Argentina cambió de sponsor. Después de más de 20 años Argentina salió campeón de América. Para el que necesita coincidencias, hay coincidencias", muestra el aviso de tan solo 16 segundos con una sucesión de texto de color blanco sobre fondo negro. El video salió nueve horas después de que Quilmes presentara su tan esperada, y clásica, publicidad alegórica del Mundial.

En su aviso, la marca del "sabor del encuentro" mostró los puntos en común, desde algunos futbolísticos hasta los astronómicos, entre torneo de Qatar 2022 y el de México de 1986, la última consagración celeste y blanca. El spot contó con la participación de algunas figuras, como el actor Mario Alarcón, el arquero Franco Armani y los músicos Pedro Aznar y Louta.

Históricas del negocio

Quilmes y Schneider no solo son las marcas nacionales emblena de AB InBev y CCU, respectivamente. La primera fue creada por Otto Bemberg en 1888 en Buenos Aires, mientras que la segunda nació como un proyecto de Otto Schneider en Santa Fe en 1931. 

En realidad, Schneider había fundado Cervecería Santa Fe en 1911, pero abandonó el proyecto luego de que Quilmes la comprara. Finalmente Santa Fe se quedó con Schneider en 1979 y la etiqueta pasó a manos del holding chileno en 1995.

Quilmes, actual filial del holding global AB InBev, ostentó el título de sponsor oficial de la Selección Argentina durante más de dos décadas hasta mediados de 2019. Ese año se disputó la Copa América que consagró a Brasil como campeón y también fue el escenario de la última derrota, por ahora, del equipo conducido por Lionel Scaloni. En octubre de ese año la AFA anunció un acuerdo con Schneider para oficiar de "hincha" de las selecciones femeninas y masculinas.

La guerra versus Isenbeck

La respuesta de Schneider al spot de Quilmes apeló a lo tácito. Sin referencias directas. Algo muy diferencia sucedió en 2002 cuando Isenbeck lanzó una campaña apuntando contra a su rival, un emblema de la industria nacional cuyo control accionario había sido vendido en esos día a la por entonces brasileña Ambev.

"¿Justo antes del Mundial? ¿Cómo se dice vendido en portugués?", podía leerse en el cartel. Arriba del texto aparecía una bandera brasileña, pero en este caso en su centro no tenía un círculo azul sino que se veía una chapita de Quilmes. Y eso fue solo el comienzo.

El cartel publicitario vino acompañado de un comercial por TV. "Somos 38 millones de hinchas que queremos ganar este Mundial y otros 38 millones que queremos que pierda Brasil", planteaba. Y, luego, concluía: "No da festejar las desgracias de Brasil con una cerveza que se vendió a los brasileros".

Es que ya entonces, los avisos de Quilmes para el Mundial eran un clásico de la publicidad argentina. Después del disruptivo "Gol, gol, gol, en tu cabeza hay un gol", de Agulla & Bacetti en 1998, para Corea-Japón 2002, plena crisis, la cervecera había lanzado el himno "Eran otros tiempos", que homenajeó a "tanta gloria, tanto fútbol, desplegado por el mundo".

Dos años más tarde, Isenbeck, en ese momento manejada por el grupo Warsteiner, redobló la apuesta con un aviso que invitaba a los consumidores a presentar una tapa de su cerveza y otra de Quilmes y, a cambio, se llevarían una botella de Isenbeck. Quilmes recurrió a la Justicia para que su rival no pudiera mencionarla, pero esto no detuvo los spots. La firma contraatacó haciendo referencia a la marca a través de sus colores o nombrándolo como "la otra". El primer comercial ya había hecho suficiente ruido y todos están al tanto de a qué etiqueta hacia alusión. 

Finalmente, en julio de 2005 la Sala I de la Cámara Civil y Comercial Federal revocó tres medidas cautelares que prohibían la difusión de la campaña y le permitió a Isenbeck mencionar a Quilmes siempre y cuando "no la desacreditara". Hoy Isenbeck forma parte del portfolio de CCU desde 2018, cuando ambas cerveceras intercambiaron varias marcas ante un pedido de Defensa de la Competencia. 

Temas relacionados
Más noticias de Mundial Qatar 2022
Noticias de tu interés

Compartí tus comentarios

¿Querés dejar tu opinión? Registrate para comentar este artículo.