El SAT advirtió a clientes de BBVA, Santander y Banamex: habrá consecuencias para quienes presten la tarjeta de crédito
El organismo fiscal alertó sobre las implicaciones legales y tributarias de compartir tu tarjeta de crédito con familiares o amigos durante el mes de marzo.
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) emitió una advertencia importante dirigida a los clientes de instituciones bancarias como BBVA, Banamex y Santander: prestar la tarjeta de crédito a terceros, aunque sean familiares o amigos cercanos, puede generar serias consecuencias fiscales para el titular.
La emisión de este aviso se enmarca en los esfuerzos del organismo público por combatir irregularidades, especialmente en un momento en que se acerca el periodo de presentación de la declaración anual de impuestos para personas físicas.
Las consecuencias de prestar tu tarjeta de crédito a terceros
Uno de los mayores peligros de prestar tu tarjeta de crédito a terceros, por más que sean amigos o familiares, ocurre cuando los gastos realizados superan los ingresos declarados.
Esta situación, puede activar una revisión automática, que implica un escrutinio detallado de todos los movimientos financieros registrados a su nombre.
Cuando un titular presta su tarjeta de crédito, todas las transacciones quedan registradas a su nombre, independientemente de quién haya realizado la compra.
Esto significa que, aunque otra persona cubra posteriormente el monto utilizado, el gasto aparecerá vinculado con el historial financiero del dueño del plástico.
Por ejemplo, un contribuyente con ingresos declarados de 300,000 pesos anuales presta su tarjeta a un familiar para compras que suman 200,000 pesos por año.
Si bien el familiar le reembolse ese dinero en efectivo, el SAT podría cuestionar cómo una persona con esos ingresos pudo realizar gastos que representan dos tercios de su ingreso anual solo en tarjeta de crédito.
El SAT advirtió sanciones para quienes hagan esta práctica común
Aunque no existen multas específicas por prestar tarjetas de crédito a terceros, el organismo público advirtió que este acto puede tener consecuencias graves si los gastos no coinciden con los ingresos declarados por el titular.
En caso de detectarse irregularidades, las multas pueden oscilar entre el 15% y el 70% del monto no declarado. Además, pueden aplicarse recargos por mora y actualizaciones, lo que aumenta el monto total a pagar.
Asimismo, el titular podría ser incluido en la lista negra de contribuyentes.
Así es el proceso de revisión por discrepancia fiscal
El organismo público puede iniciar un proceso de discrepancia fiscal si los gastos superan los ingresos declarados. Este consiste en los siguientes pasos:
- Notificación sobre la detección de inconsistencias.
- Solicitud de aclaración y presentación de documentación que justifique los gastos efectuados.
- Análisis de información proporcionada por el contribuyente.
- Determinación de la existencia de discrepancia fiscal. Si el resultado es positivo, se calcula el total de impuestos omitidos y se aplican las sanciones correspondientes.
Recomendaciones para los tarjetahabientes
El organismo fiscal recomendó enfáticamente que los clientes de instituciones bancarias utilicen sus tarjetas de crédito exclusivamente para gastos personales.
Si bien puede parecer un gesto de ayuda prestar la tarjeta a un familiar o amigo, las implicaciones fiscales pueden ser mucho más problemáticas que el beneficio.
Los expertos en materia fiscal sugieren las siguientes prácticas para evitar problemas:
- Mantener un registro detallado de todos los gastos realizados con tarjetas de crédito.
- Conservar comprobantes de ingresos que justifiquen el nivel de gastos.
- Evitar completamente prestar tarjetas de crédito a terceros.
- Considerar alternativas como transferencias electrónicas que dejan un rastro claro del origen y destino de los fondos.
- En caso de gastos compartidos, es preferible que cada persona realice su pago por separado.