No lo sabías

Científicos confirman que millones de personas son menos inteligentes por exponerse a este producto: fue muy utilizado en México hasta 1990

Se descubrió que la inclusión de este metal tóxico en la gasolina está relacionada con el desarrollo de trastornos psiquiátricos en generaciones enteras en Estados Unidos.

En esta noticia

Un equipo de científicos de las universidades de Duke y Florida Estatal compartió un descubrimiento sin precedentes sobre los efectos del plomo en la salud mental. 

En 1923, cuando se añadió plomo a la gasolina para mejorar el rendimiento de los motores, nadie podía prever las consecuencias que esta decisión tendría en el bienestar psicológico de generaciones enteras.

Los expertos estimaron que 151 millones de casos de trastornos psiquiátricos en Estados Unidos, en los últimos 75 años, están directamente relacionados con la exposición infantil a los gases provenientes de combustibles con plomo. 

En México, el panorama podría no ser diferente. El país también utilizó gasolina con plomo hasta finales de la década de 1990, exponiendo a millones de niños a los mismos riesgos.

 Un descubrimiento alarmante: el plomo como causante de enfermedades mentales. Fuente: Shutterstock. 

Este billete de 100 dólares se despide | llegan nuevos billetes a todo el país: dónde y cuándo pueden cambiarse los viejos

Nacen nuevos dólares | Estos son los billetes que se van a usar ahora en todos los bancos y tiendas del país

El vínculo oculto entre el plomo y los trastornos psiquiátricos 

Los expertos han descubierto que el plomo tiene consecuencias graves en el cerebro en desarrollo.

De acuerdo con el científico Aaron Reuben de la Universidad de Duke, "los seres humanos no están preparados para manejar concentraciones de plomo entre 1.000 y 10.000 veces mayores que los niveles naturales, como ocurrió a lo largo del siglo XX". 

Este metal puede dañar las células cerebrales y alterar funciones del sistema nervioso

Lo más alarmante es que no existe un nivel seguro de exposición: incluso pequeñas cantidades pueden ser perjudiciales, especialmente durante la infancia, cuando el cerebro aún se está desarrollando.

Si bien su uso fue prohibido en 1996, el daño ya estaba hecho. Los niños que estuvieron expuestos en las décadas de 1960 y 1970, cuando su uso estaba en su punto máximo, experimentaron alteraciones que los hicieron más vulnerables a trastornos psicológicos como la depresión, la ansiedad y problemas de atención. 

Estas consecuencias no solo afectaron a nivel individual, sino que también dejaron una marca en generaciones enteras, aumentando la incidencia de rasgos como el neuroticismo.

¿Por qué se añadía plomo a la gasolina? 

El tetraetilo de plomo incrementaba el octanaje de la gasolina, lo que a su vez permitía que los motores de combustión interna funcionaran de manera más suave, evitando el fenómeno conocido como "detonación".

Además, era relativamente barato de producir y fácil de añadir a la gasolina, lo que lo convertía en una solución atractiva desde el punto de vista económico para las compañías petroleras.

La promesa del progreso envenenada: cómo el plomo en la gasolina transformó una generación. Fuente: FreePik. 

La huella tóxica del plomo: impacto en el desarrollo cognitivo y el coeficiente intelectual

El artículo publicado en Journal of Child Psychology and Psychiatry reveló que más de 170 millones de estadounidenses nacidos antes de 1996 presentaron niveles de plomo en la sangre considerados "preocupantes desde el punto de vista clínico". 

Esta exposición no solo tuvo consecuencias para la salud mental de quienes la padecieron directamente, sino que también pudo haber influido en su calidad de vida y en su éxito personal. 

Los investigadores explican que el impacto del plomo puede compararse a una "fiebre de bajo grado", ya que, aunque no siempre es lo suficientemente grave como para requerir atención médica, tiene la capacidad de afectar el bienestar general.

El plomo fue responsable, además, de una pérdida colectiva de aproximadamente 824 millones de puntos en el coeficiente intelectual (CI) de la población de Estados Unidos a través del siglo XX, según investigaciones previas. 

Gasolina con plomo en México

México también vivió un extenso periodo de uso de gasolina con plomo, antes de optar por alternativas libres de este metal tóxico. 

Durante las décadas de 1970, las gasolinas Nova y Extra contenían tetraetilo de plomo, un compuesto utilizado para aumentar el octanaje. 

No fue sino hasta los años 90, después de que estudios detectaran niveles de plomo en la lluvia de la Ciudad de México, que Pemex comenzó a ofrecer gasolina Magna sin plomo. Sin embargo, el modelo Nova continuó en circulación hasta 1997.

Temas relacionados
Más noticias de descubrimiento