China creció menos de lo esperado y el oro se derrumbó casi 10% en un sólo día

El oro fue destruido como refugio seguro, se probó que no es seguro. Debido a la decepción, la mayoría de la gente está reduciendo sus tenencias de oro, declaró George Soros. El oro se desplomó 8,7% en Nueva York, su peor caída desde 1980, y cerró en u$s 1.370,80 la onza después de que los decepcionantes datos sobre el crecimiento del PBI de China provocaran una baja generalizada en la cotización de las materias primas. Así, el metal precioso dio continuidad a las fuertes pérdidas de la semana pasada, cuando cayó cerca del 5%, de modo que acumula una caída superior al 20% desde que alcanzó el máximo histórico de u$s 1.888, en agosto de 2011.

Los inversores abandonaron al oro junto a otras materias primas, como el petróleo y el cobre, después de conocerse que el producto bruto interno de China creció menos a lo esperado en el primer trimestre. La economía de China se desaceleró inesperadamente en el primer trimestre del año, con una expansión de un 7,7% frente al mismo lapso del 2012, ante el crecimiento de 7,9% en los últimos tres meses del 2012 y por debajo de la expectativa de un avance del 8% esperado por el mercado, según un sondeo de Reuters.

Además, presionó a la baja a la cotización del oro la posibilidad de que Chipre venda parte de sus reservas del metal para financiar parte del rescate europeo. Por si fuera poco, la semana pasada los analistas de Goldman Sachs revisaron a la baja sus previsiones sobre el precio medio que registrará este año el oro hasta los u$s 1.545 la onza, frente a los u$s 1.610 que habían calculado antes.

¿A qué obedece la caída? Para Gustavo Ber, titular del estudio homónimo, este brusco movimiento se encontraría impulsado por agresivos desarmes de carteras tras un largo período de apreciación, considerando además que alrededor de un 30% de la demanda mundial queda reservada a las apuestas financieras. A su juicio, tras alcanzar una exagerada valuación, podría ahora estar ingresando en otra etapa de overshooting, hasta que logre finalmente estabilizarse: El próximo nivel técnico será los u$s 1.280, y si lo perforara podría activar mayores olas vendedoras y un definitivo cambio de tendencia.

En la Argentina, la prohibición de comprar moneda extranjera afectó al oro, por lo que los grandes jugadores que comercializaban este metal en el país tuvieron que exportar su tenencia, y se limitan a recomprar en caso de que sus clientes quieran vender, de modo de garantizar la liquidez, afirma Fernando Pepe, gerente de Productos Cambiarios del Banco Supervielle, quien recomienda permanecer en el activo y no salir a liquidarlo en estos momentos: El oro sigue siendo una buena opción a largo plazo, más allá de la coyuntura, ya que seguirá defendiendo la capacidad de compra, aunque no sé si entraría ahora, con un mercado en baja, ya que no se sabe si es el piso o si seguirá bajando.

Como movida especulativa no parece disparatado pensar en comprar en esta zona. Eventualmente, Europa también necesitará imprimir euros. Sin embargo, más prudente sería esperar. Es arriesgado apostar contra una caída tan abrupta. Va a estar todo atado a la emisión de los bancos centrales y a las expectativas de emisión. En principio hay mucha presión para continuar emitiendo, explica Miguel Angel Boggiano, director de Carta Financiera.

Fernando Baer, titular de Bconomics, cree que el dólar va a tender a apreciarse lentamente: En consecuencia, el oro y otros commodities podrían seguir el mismo camino. Como al oro se la considera una moneda extranjera, está prohibido la adquisición para atesoramiento. En consecuencia, para invertir en el metal en el país hay que hacerlo a través de un ETF (fondos de inversión) o en el Banco Ciudad, donde comercializan oro nacional que es triple cero, en lugar de cuatro ceros que es el internacional. Aparte, el spread entre la compra y la venta es grande.