Es el postre favorito del Papa Francisco y lo puedes preparar de forma sencilla en tu casa
El papa Francisco suele recibir muchos regalos, pero uno de los que más disfruta es cuando recibe alfajores de su Argentina natal. Cómo prepararlos.
El papa Francisco es el líder de la Iglesia Católica y un faro espiritual para millones de fieles alrededor del mundo. Desde que inició su pontificado, muchas personas se acercan para pedirles su bendición, pero también para ofrecerles regalos.
Desde camisetas de fútbol hasta objetos típicos de cada país del mundo, el sumo pontífice ha recibido una gran cantidad de obsequios en estos últimos 11 años.
Pero uno de los que más disfruta es cuando alguien le lleva una de sus golosinas favoritas: los alfajores. Francisco particularmente disfruta la variedad que se produce en la provincia argentina de Córdoba.
Cuál es la historia del alfajor
El alfajor tiene origen durante la ocupación árabe de la Península Ibérica. Los árabes introdujeron una variedad de dulces, incluido el "al-hasú", que significaba "el relleno", que se caracterizaba por ser una mezcla de miel, almendras y especias envuelta en una masa.
Esta receta influiría más tarde en el desarrollo del alfajor en España y, eventualmente, en su travesía hacia el nuevo mundo.
En América latina, y más específicamente en Argentina, el alfajor fue adaptándose a los ingredientes locales disponibles, convirtiéndose en una golosina masiva y popular en el siglo XIX. Augusto Chammás, un químico francés radicado en el país sudamericano, es a menudo acreditado con la modernización del alfajor en 1869.
Cada zona de Argentina tiene su variante distintiva. Por ejemplo, en Córdoba, se destacan los alfajores rellenos de dulce de fruta, como el membrillo, mientras que, en otras regiones, como Santa Fe, el alfajor es conocido por tener múltiples capas y estar repleto de dulce de leche.
Cómo preparar alfajores cordobeses con dulce de leche
Ingredientes
- 500 g. harina para repostería.
- 550 g. azúcar glas.
- 120 g. manteca.
- 125 g. huevos.
- 10 g. polvo para hornear.
- 10 g. bicarbonato de sodio.
- 15 g. extracto de malta.
- 50 g. miel.
- 300 g. dulce de leche.
- Agua.
- 1 cucharada de jugo de limón.
Preparación
- Tamizar la harina, el polvo de hornear y el bicarbonato de sodio. Mezclar y reservar.
- Mezclar la manteca con 150 g. de azúcar glas. Luego agregar los huevos, miel y extracto de malta.
- Hacer una corona con los ingredientes secos y colocar dentro los fluidos. Se debe unir sin amasar, utilizando una espátula. Dejar descansar la masa en el refrigerador por 20 minutos.
- Para armar las tapas, utilizar un cortante de 7 cm de diámetro y 3 mm de espesor sobre la masa. Si quedan restos, unirlos con espátula y continuar cortando.
- Hornear las tapas durante 4 minutos. Una vez que se enfríen, colocar el dulce de leche en una manga y colocar un poco en el centro de una de las tapas, cubriendo con otra.
- Hacer un glaseado con el resto del azúcar glas y el jugo de limón. Una vez que se espese, introducir los alfajores hasta cubrirlos por completo. Luego, dejar secar en una rejilla. Una vez que se enfríe el glaseado, están listos para comer.