Cuánto dinero hay que ganar al mes para no ser pobre y llegar a ser clase media en diciembre de 2024, según la OCDE
Los ingresos para pertenecer a la clase media cambian según el coste de vida y la renta mediana del país. Más detalles, a continuación.
Según la OCDE, la clase media en España está compuesta por quienes tienen ingresos mensuales entre el 75% y el 200% de la renta mediana. Con un 59,63% de la población (según la fórmula de Canto, 2021) en esta franja y en un entorno económico desafiante, surge la pregunta de qué ingresos son realmente necesarios para pertenecer a este grupo.
En 2024, la renta media en el país se sitúa en 1790 euros mensuales, de acuerdo con datos recientes, lo que establece los límites de ingreso para considerarse de clase media entre 1343 y 3581 euros al mes, o hasta 30.386 euros anuales.
¿Cuáles son los ingresos que definen a la clase baja y alta?
Para la OCDE, cualquier persona que gane menos de 1343 euros mensuales queda en la categoría de clase baja, mientras que quienes superan los 3581 euros mensuales se consideran parte de la clase alta.
Los ingresos no solo delimitan la pertenencia a una categoría socioeconómica, sino también el acceso a un nivel de vida acorde con las expectativas de cada grupo.
Los desafíos de pertenecer a la clase media en diciembre de 2024
Ser parte de la clase media en España no depende solo de los ingresos; factores como la ubicación geográfica y el tamaño del hogar juegan un papel clave.
En 2024, la inflación y el alza de precios en sectores esenciales, como vivienda y energía, han agravado la presión sobre los presupuestos familiares. Incluso aquellos que técnicamente cumplen con los requisitos de ingresos de la clase media enfrentan dificultades para mantener la estabilidad que solía caracterizar a este grupo.
El acceso a vivienda, servicios básicos y la capacidad de ahorrar varían enormemente según la zona, dejando a muchas familias en áreas de alto coste con la sensación de que sus ingresos son insuficientes.
El análisis de la OCDE pone de manifiesto esta realidad y lanza una advertencia: si no se actúa para frenar el aumento de precios y aliviar el costo de vida, la estabilidad económica de la clase media podría estar en juego.
Esto añade otra capa de desafíos para el futuro de la clase media en España, cuyos ingresos no siempre alcanzan para superar los gastos esenciales, afectando la calidad de vida y la capacidad de ahorro de los hogares.