Si un hijo fallece antes que los padres, ¿a quién le corresponde quedarse con la parte de su herencia?
El reparto de las herencias y el orden de sucesión puede ser un tema complejo, sobre todo cuando existen muchos herederos. ¿Qué pasa cuando un hijo fallece antes que los padres?
La pérdida de un ser querido no solo implica atravesar por un periodo de luto, sino también la realización de trámites burocráticos que a menudo resultan muy agotadores. Y es que el reparto de las herencias y el orden de sucesión puede resultar un tema complejo, sobre todo cuando existen muchos herederos.
Otra situación que genera muchas dudas es en el caso de que uno de los herederos legales muera antes que el testador, como por ejemplo en el caso de que un hijo fallezca antes que los padres. ¿Quién se queda con su parte de la herencia?
El Código Civil recoge en su artículo 924 el derecho de representación que es "el que tienen los parientes de una persona para sucederle en todos los derechos que tendría si viviera o hubiera podido heredar". Es decir, estos nuevos herederos sólo tendrán derecho a recibir la parte que le correspondía a ese hijo fallecido.
Quién se queda con la herencia si un hijo fallece antes que los padres
En caso de que un hijo fallezca antes que los padres, se aplicará el derecho de representación mencionado, por lo que su parte de la herencia se repartirá entre sus representantes.
Según el código civil, estos tendrán que ser siempre descendientes del fallecido (en este caso el hijo) pero en ningún caso podrían ser los ascendientes. Así, los herederos serían los nietos -los hijos del hijo fallecido- que se repartirían la herencia correspondiente a su padre o madre. En el caso de que no existan, se repartiría entre el resto de herederos originales.
La ley establece además que "la división de la herencia se hará por estirpes, de modo que el representante o representantes no hereden más de lo que heredaría su representado, si viviera".
Según aclaran desde Conceptos Jurídicos, la representación se aplicará en los casos de que el fallecido no haya elaborado un testamento.