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"Qué el espíritu nos ayude...": el Papa Francisco pide ayuda divina para solucionar los problemas de toda la Humanidad

En la audiencia General del miércoles, el Papa Francisco concluyó su ciclo de catequesis sobre el Espíritu Santo

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En la Audiencia General del miércoles, el Papa Francisco concluyó su ciclo de catequesis sobre el Espíritu Santo y su papel en la vida de la Iglesia, destacando que es la "fuente siempre fluyente de la esperanza cristiana".

El Santo Padre dedicó su reflexión al tema "El Espíritu Santo y la esposa: el Espíritu Santo guía al Pueblo de Dios hacia Jesús nuestra esperanza". 

En ella, recurrió al Libro del Apocalipsis, mencionando la invocación escatológica "Ven", que es dirigida a Cristo resucitado por el Espíritu y la Esposa (la Iglesia), para recordar que nuestra esperanza en la venida final de Jesús es siempre presente en la Iglesia.

El Papa también explicó que la Iglesia no solo espera la venida final de Cristo, sino que, en su condición actual y peregrina, espera también la venida continua de Jesús.

El Espíritu Santo, "el verdadero alter ego de Cristo"

El Papa Francisco destacó que, tras la Resurrección, el Espíritu Santo ha tomado el lugar de Cristo en la vida de la Iglesia. Esta relación inseparable entre el Espíritu y Cristo es esencial para la economía de la salvación. 

El Espíritu Santo, " el verdadero alter ego de Cristo." Fuente: archivo.

 "Es justo que así sea -explicó el Papa-, porque después de la Resurrección, el Espíritu Santo es el verdadero alter ego de Cristo, Aquel que toma su lugar, que lo hace presente y operante en la Iglesia". Por eso, prosiguió, "Cristo y el Espíritu son inseparables también en la economía de la salvación". 

Explicó que, por eso, la Iglesia ha evolucionado en su forma de invocar "Ven", dirigiéndola no solo a Cristo, sino también al Espíritu Santo, como en los himnos tradicionales Veni Creator Spiritus y Veni Sancte Spiritus.

La "esperanza cristiana": la vela que impulsa a la Iglesia

El Santo Padre subrayó que el Espíritu Santo es la "fuente siempre borboteante de la esperanza cristiana", comparando esta esperanza con una "vela" que impulsa a la Iglesia en el mar de la historia. Añadió que la esperanza cristiana no es un deseo vago, sino una certeza fundamentada en la fidelidad de Dios.

La "esperanza cristiana": la vela que impulsa a la Iglesia. Fuente: srchivo.

Sin embargo, insistió en que los cristianos no deben conformarse con solo tener esperanza, sino que deben "irradiar esperanza". La esperanza, afirmó, es el don más hermoso que la Iglesia puede ofrecer a toda la humanidad.

Evangelización a través del amor

Finalmente, el Papa recordó las palabras de San Pedro, quien instó a los cristianos a estar siempre dispuestos a dar razón de su esperanza, pero con mansedumbre y reverencia. La verdadera convicción, explicó el Papa, no se logra tanto por la fuerza del argumento, sino por el amor con el que se presenta. Este método de evangelización es "abierto a todos" y resulta ser el más eficaz.

El Papa concluyó su reflexión con una oración, pidiendo al Espíritu Santo que nos ayude a "abundar siempre en esperanza", un llamado a vivir con fe y confianza en el futuro, guiados por el Espíritu de Dios.


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