Advierten que el país ya está en recesión

El diputado y ex presidente del Banco Central Alfonso Prat Gay aseguró hoy que la economía argentina ya está “en recesión”, al tiempo que advirtió que el cepo cambiario profundiza esa tendencia, lo que genera “más inflación”.

En la misma sintonía, la consultora Ecolatina afirmó que el estancamiento de la actividad económica comenzó a “deteriorar” al mercado laboral y al nivel de consumo, y auguró que “las presiones inflacionarias van a persistir incluso en un escenario recesivo”.

Ambos análisis coincidieron en que el cepo cambiario profundizó la tendencia recesiva y aludieron a las caídas en tres sectores claves: la construcción, la industria automotriz, y el agropecuario.

Prat Gay planteó: “No tenemos todos los datos (económicos) de junio pero me parece que ya estamos en recesión”. El diputado de Coalición Cívica estimó que “más de la mitad de la economía cae a tasas de dos dígitos largos”.

“Es muy difícil pensar, más allá del dibujo de (el secretario de Comercio Interior Guillermo) Moreno, que el resto de la economía, sobre todo el sector servicios, puede estar compensado la caída de lo otro”, reflexionó en declaraciones a radio 10.

Consultado acerca de cuánto de esta situación se le puede atribuir a la crisis internacional, afirmó que “cero de culpa”, e incluso sostuvo que ese contexto es “favorable” para el país.

En cuanto al cepo cambiario, alertó que se profundizan la tendencias de “más recesión, y más inflación”.

“Más inflación por la emisión como único recurso, y más recesión, porque estas medidas cambiarias, más allá de que la gente crea que están o no para quedarse, en la práctica provocan la recesión que estamos viendo”, analizó.

Por su parte, Ecolatina, al hacer un balance económico del primer semestre del año, describió: “El estancamiento de la economía es palpable, la inflación no cede, la tensión cambiaria persiste, la situación fiscal del Sector Público consolidado (Nación + Provincias) se deteriora, y, pese a las trabas a la demanda de dólares (venta de divisas, giro de utilidades e importaciones), las reservas internacionales no crecieron”.

Para Ecolatina, en este contexto de menor dinamismo de la demanda interna, lo que “sorprende es la resistencia del proceso inflacionario”.
“La inercia, las expectativas, la brecha cambiaria y las trabas a la compra de divisas, están jugando un papel clave”, aseveró.

Así, explicó que ante una baja demanda de dinero y la imposibilidad de comprar dólares oficiales para ahorro, se incentiva ese proceso porque “los agentes terminan gastando buena parte de los pesos que no desean acumular”.

Al respecto, previno que “si a esto se le suma una mayor emisión para financiar al fisco, las presiones inflacionarias van a persistir incluso en un escenario recesivo”.