Preparan un sistema anti robo de cajeros que mancha los billetes

El BCRA autorizó el "entintado de billetes" como una alternativa de seguridad frente a la instalación de una alarma con conexión directa con la policía. Es un sistema que mancha los billetes que están dentro de un cajero y los vuelve inutilizables, en caso de que alguien intente robarlo. Sólo protege al dinero dentro del cajero, no a los clientes. Faltan definir cuestiones técnicas y legales, como qué pasa si alguien trata de pagar con un billete entintado

El Banco Central (BCRA) trabaja en estos días en pulir los detalles regulatorios para habilitar un nuevo método de seguridad contra robos de cajeros automáticos. Se trata del entintado de billetes, un sistema de disuasión que mancha con tinta indeleble a los billetes que están dentro de un cajero en caso de que alguien intente robarlos, para volverlos así inutilizables.

Esta medida de seguridad está en uso en varios países, incluso de la región, y fue permitida por la entidad que conduce Federico Sturzenegger, con el objetivo de dar alternativas de seguridad a las entidades financieras ante el aumento del valor nominal de los billetes, aunque para que empiece a funcionar faltan homologar sistemas y definir algunos aspectos legales.

Después de años de charlas entre los sectores de seguridad de los bancos y el BCRA, a principios de este mes la autoridad monetaria emitió la Comunicación a 6182 sobre la incorporación del entintado de billetes. La nueva regulación agrega una opción para que los bancos cumplan con los exigentes requisitos de seguridad para cajeros que no están dentro de las sucursales, los que están operativos fuera de horario bancario y suelen tener un lobby propio. También para los que están fuera de los bancos.

Hasta ahora, esos cajeros debían estar conectados a un sistema de alarma con la dependencia policial más cercana. Cuando se empiece a usar el entintado de billetes podrán obviar la alarma monitoreada a cambio del nuevo método (siempre y cuando estén monitoreados desde el banco).

"Es algo que empujamos nosotros, porque llevaba varios años siendo tratado dentro del banco [el BCRA] y se pensaba hacerlo obligatorio. Pero la verdad es que no es barato y preferimos permitirlo para ver si toma vuelo, si los bancos lo prefieren", dijo una fuente dentro de la autoridad monetaria.

La norma establece que, para quedar exentos de la conexión directa con la policía ,los cajeros con sistema de entintado de billetes deben ser acompañados con cartelería que advierta respecto del mecanismo "con la finalidad de desalentar la comisión de un hecho delictivo". ¿Cómo funciona? El sistema de entintado se utiliza en Chile, Paraguay, Brasil y otros países de la región. En algunos de ellos, como Chile, es obligatorio. Está compuesto por unos cartuchos de tinta generalmente roja o de otro color bien llamativo que están dentro de las "caseteras" que dentro de los cajeros almacenan los billetes.

Cuando alguna de las medidas de seguridad de los cajeros se activa sensores de movimiento, térmicos, sísmicos y de apertura no programada de la caja de valores, un mecanismo de aire comprimido dispara la tinta e inutiliza a todos los billetes. La activación es automática, para que no haya riesgo de coerción. El cartel que anuncia el sistema es tan importante como la tinta ya que no tiene ningún sentido "reventar" (a veces los ladrones usan masas, otras gas a alta presión o explosivos) un cajero si el dinero que se consigue no tiene utilidad alguna.

No se trata de una medida que le pueda evitar un robo a un cliente que va a sacar plata. Sólo protege al cajero automático de ataques contra su bóveda.

"En mi opinión el interés por este sistema crece por la llegada de billetes de mayor denominación. Un cajero cargado totalmente con billetes de $ 100 almacena unos $ 800.000. Ahora, con los billetes de $ 500, la carga teóricamente podría alcanzar los $ 4 millones. No te olvides que dentro de poco el BCRA planea sacar billetes de $ 1000", dijo a El Cronista Jorge Portolesi, gerente de la división gestión integral de ATMs de Prosegur, una de las representantes locales de empresas de cajeros. "En principio, podría ser un ahorro para los bancos porque el monitoreo tiene un fee mensual, mientras que el entintado se instala una vez y listo", agregó.

La pretensión del BCRA de ampliar la red de cajeros y de bancos con sucursales más económicas, además, puede hacer útil este sistema.

Las proveedoras del servicio son empresas extranjeras como Villiger y Oberthur, que ya ofrecen el sistema en otros países de la región. Lo canalizarían a través de las marcas que proveen los cajeros al mercado local: Diebold (de la que Prosegur es representante local), NCR y Wincor.

En el sector calculan que, por cada cajero, el sistema cuesta entre u$s 2500 y u$s 3000. Dilemas legales Por lo pronto, al sistema de entintado todavía le falta tiempo para llegar a la calle. En principio, el BCRA aclara que antes de lanzarlo tiene que homologar a nivel técnico los sistemas.

Hay algunos en los que los cartuchos de tinta ocupan parte de a casetera de billetes, por lo que restan capacidad de carga a los cajeros. Otros, más nuevos y también más caros, reemplazan la tapa de la casetera con lo cual no alteran la carga. La idea es extender la capacidad de los cajeros, no reducirla.

Pero además de cuestiones técnicas, hay otras legales. Algo a determinar, por ejemplo, es que puede hacer un banco con $ 4 millones entintados que son abandonados por un ladrón que desconocía el sistema. ¿Se imprime de vuelta sin costo para el banco, se le cobra la reimpresión a la entidad o se encarga una empresa de seguros?

Más interesante aún. Una persona con $ 4 millones entintados en la mochila probablemente vaya presa. ¿Pero qué pasa si otra trata de pagar $ 500 con un sólo billete entintado que trae en la billetera y que aceptó en un comercio? ¿Es un delito? Esa sintonía fina es la que debe definir el BCRA.
Temas relacionados
Más noticias de cajeros

Las más leídas de Finanzas y Mercados

Destacadas de hoy

Cotizaciones

Noticias de tu interés