Las huellas del relato K que le quitan el sueño a las empresas privadas

Hacia fines de este segundo mandato de la presidenta Cristina Kirchner, en el empresariado surgieron algunos datos que demostrarían el daño que el relato K habrá dejado para el sector privado. Hay desconcierto entre algunas empresas y el Gobierno saca más ventaja de esta situación.

Los que siguen son algunos de los principales resultados de una encuesta realizada por Ipsos- Mora y Araujo para medir la imagen de las empresas 100% privadas luego de las gestiones kirchneristas, a los que El Cronista tuvo acceso:

* El 71% de los consultados considera que los supermercados y/ o las empresas son las responsables de los aumentos en los precios y de que no se encuentren en Precios Cuidados.

* El 62% de los argentinos considera que es mejor un país con mayor cantidad de empresas del estado y sólo el 24% cree que es mejor si hay mayor cantidad de empresas del sector privado .

* La actividad económica para abajo también puede arrastrar la credibilidad de los sectores. Sería el caso de las terminales que, por ejemplo, en septiembre 2011 tenía en la opinión pública una opinión muy/bastante favorable mientras que en julio de este año, ese grado de aceptación se desplomó al -10%; es decir muy/bastante desfavorable.

* De un total de 1.000 entrevistados, la encuesta reveló que el 57% cree que el transporte público debe estar en manos del Estado, el 54% las petroleras y el 43% las de consumo masivo.

Por todos estos datos, hay preocupación en distintos sector que impulsan la necesidad de revalorizar en la opinión pública el rol del empresario privado como principal generador de empleo. Y por eso, aún persiste el sabor amargo que dejó el final del 50 Coloquio de IDEA, hace sólo una semana atrás.

"Ese ping pong que se dio entre Isela y Miguel fue la síntesis de lo que pasa en el movimiento empresario no kirchnerista", sintetizó uno de los principales referentes del Grupo de los Seis (G6) en relación a las diferencias (luego minimizadas por los organizadores) entre Isela Costantini (), titular de ese coloquio y CEO de General Motors y Miguel Blanco, presidente de IDEA, de Swiss Medical y vocero del Foro de Convergencia Empresario (FCE). La empresaria había señalado que siempre hay diálogo con el Gobierno desautorizando los dichos de Blanco quien había enfatizado que, por el contrario, el diálogo está cortado.

En el G6 promueven un encuentro para los próximos días para limar asperezas que se realizaría en la Cámara de Comercio, que preside Carlos de la Vega. Quienes fogonean este encuentro señalan que "lo que nos divide son estrategias pero no el fondo". En otros sectores hay dudas sobre este tema pero el Gobierno las aprovecha a favor.

Desde la Unión Industrial también hubo chispazos y en la reunión de su mesa chica del martes pasado se buscó armonizar criterios. Allí se estima que para este año la caída de producción industrial será de 2,8% y que habrá problemas de empleo. "Lo que verdaderamente preocupa es el nivel de empleo, por eso la articulación del diálogo en el empresariado debe ir desde lo positivo", señaló recientemente uno de los nuevos referentes de esa entidad, el salteño José Urtubey.

Si el clima fabril está caliente, el que reina en el campo no está más fresco. "El problema con la Argentina y con este Gobierno es que no se dialoga poniéndose en el lugar del otro sino queriendo imponer una posición", observó Gustavo Grobocopatel en medio de fuertes reclamos de los productores por los reiterados ataques a los silo-bolsas en el campo.

Rubén Ferrero, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) remarcó su preocupación por estos ataques y la instalación "de un tema ideológico instalado por el Gobierno en contra del sector productivo agropecuario". Un informe de esta entidad advierte que si estuviera vigente la Resolución 125 hoy la retenciones al campo sería del 38% por encima de 35% en relación con el intento del Gobierno de responsabilizar al campo por la escasez de dólares que sólo en los últimos 3 años de cepo cambiario pasaron de 42.000 millones de dólares a 27.000 millones de dólares por las políticas instrumentadas desde el Banco Central.

A las oficinas del secretario de Comercio Interior, Augusto Costa, ya llegaron datos que al menos prenden luces amarillas sobre la venta de alimentos básicos. Los números del sector privado señalan que en los primeros siete meses, hubo bajas en café (-31%), azúcar (-8%), yerba mate (-3%), lácteos (-2%) y carne aviar (-4%).

También existe mucha preocupación por el resurgimiento de tasas municipales en seguridad e higiene, comercialización de envases, publicidad interior o tasas de abasto. Según un informe que circula en Copal y que relevó la situación de 100 municipios al que accedió El Cronista, se concluyó que "un 77% de los municipios cobran estas tasas en relación a un porcentaje de ventas mientras que el 23% restante tributa cifras fijas".

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