HUBO choques entre manifestantes y la policía que utilizó carros hidrantes

Masiva protesta de estudiantes en Chile pone en jaque al gobierno de Piñera

Si no obtienen respuesta positiva, pedirán un plebiscito para una reforma educativa que incluya la gratuidad de la enseñanza universitaria

Decenas de miles de estudiantes (150.000 según los organizadores) marcharon por las calles de Santiago de Chile, y en otras ciudades del país, demandando al gobierno de Sebastián Piñera por reformas educativas, en un conflicto que ya lleva más de tres meses y que provocó esta semana diversos incidentes entre los manifestantes y los carabineros.
La marcha de ayer fue convocada por las principales agrupaciones estudiantiles y el Colegio de Profesores y contó con la aprobación oficial del gobierno nacional que había impedido -y reprimido- las anteriores protestas. Sin embargo, y aunque se desarrolló mayormente en forma pacífica, se registraron nuevamente incidentes en Santiago y en otros puntos del país. Se vió a jóvenes con rostro cubierto incendiar al menos dos autos, quebrar ventanales de un edificio y formar barricadas en algunos puntos de la ciudad, lo que derivó en choques con la policía que utilizó carros hidrantes y gases lacrimógenos para disolver las protestas.
Las autoridades aprovecharon estos hechos para deslegitimar el reclamo y acusar a los estudiantes de los destrozos. Los universitarios y el Colegio de Profesores quisieron marchar una vez más y les dimos autorización. Sin embargo, los resultados han demostrado una vez más que desafortunadamente ellos no tienen el control de las marchas, dijo el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter.
Los estudiantes salieron rápidamente a replicar y aseguraron no son responsables por los hechos de violencia y acusaron a infiltrados. La presidenta de la Federación de Estudiantes de Chile, Camila Vallejo, rechazó en nombre de la organización todos los actos de violencia que se han suscitado después de la marcha pacifica y exitosa que hemos tenido en la jornada de hoy.
Las marchas estudiantiles reciben el respaldo de padres y maestros, además de ciudadanos que han comenzado a realizar cacerolazos -un tipo de manifestación no visto desde la dictadura de Augusto Pinochet- en rechazo a la manera en que el gobierno enfrenta la protesta.
El Ministerio de Educación presentó recientemente una propuesta de reformas educativas que fue rechazada por los estudiantes, pero que parcialmente comenzó a analizarse en el Congreso.
Los universitarios le dieron plazo hasta hoy al gobierno paraque se pronuncie a favor de los reclamos.
Las marchas fueron masivas en todo el país. Se registraron en Antofagasta, Valparaíso, Concepción, Valdivia, Talca, Iquique y otras regiones.
Vallejo subrayó que si no obtienen respuestas favorables es bueno que sea la ciudadanía... la que decida si quiere un sistema nacional público, de calidad y gratuito .... vamos a tener que exigir otra vía de solución como convocar a un plebiscito, detalló. Los jóvenes exigen que el Estado asuma el financiamiento de la educación pública y que cese el lucro en que se han convertido los centros de enseñanza superior.
Camilo Ballesteros, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago, explicó que este país es de los pocos del mundo donde la universidad pública tiene un costo anual sobre los u$s 4.000, mientras que las privadas llegan a u$s 10.000 al año.
Ante los dichos de Hinzpeter de que los estudiantes no eran los dueños del país, Vallejo señaló que claramente que no, sino que es de los propios empresarios. Pero sí somos dueños de nuestro futuro, aclaró.

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