Un reciente estudio dirigido por un grupo de científicos reveló un beneficio adicional del aceite de oliva para la salud, ampliando su ya reconocido impacto positivo en la dieta. 

Este aceite, célebre por su alto contenido de ácidos grasos monoinsaturados, sigue destacándose por sus propiedades cardiovasculares y antioxidantes, y ahora se le atribuye un nuevo efecto saludable.

El nuevo beneficio descubierto por científicos en el consumo de aceite de oliva

La investigación publicada en Frontiers in Nutrition y liderada por la Dra. Marta Sánchez y el Dr. Pablo Gómez descubrió un beneficio innovador del aceite de oliva virgen extra (AOVE). 

La investigación científica, que analizó los efectos de distintas dietas en ratones, revela que el AOVE podría ser clave para la regulación de la microbiota intestinal.

En el experimento, los ratones fueron alimentados con dietas que incluían desde una estándar hasta variantes enriquecidas con mantequilla, aceite de oliva refinado y AOVE. 

Los resultados demostraron que aquellos que recibieron AOVE presentaron una menor resistencia a los antibióticos y redujeron la virulencia bacteriana en comparación con los que consumieron mantequilla. 

Esto sugiere que el aceite de oliva virgen extra posee propiedades prebióticas, favoreciendo un equilibrio saludable de bacterias intestinales.

En contraste, los ratones que ingirieron mantequilla mostraron un incremento en cepas bacterianas asociadas con enfermedades, destacando la superioridad del AOVE en comparación con otras grasas en la dieta. 

Los beneficios adicionales del aceite de oliva

El aceite de oliva virgen extra (AOVE) no solo ofrece los beneficios conocidos, sino que sus propiedades van más allá de lo previamente documentado. El AOVE se destaca en varias áreas importantes para la salud:

• Reducción del riesgo cardiovascular: su riqueza en ácidos grasos monoinsaturados, como el ácido oleico, ayuda a bajar el colesterol LDL ("malo") y a elevar el colesterol HDL ("bueno"), reduciendo el riesgo de enfermedades cardíacas.

• Protección contra enfermedades neurodegenerativas: consumir AOVE regularmente puede estar asociado con un menor riesgo de desarrollar enfermedades como el Alzheimer y el Parkinson, gracias a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.

• Propiedades antioxidantes: el AOVE contiene antioxidantes naturales, como la vitamina E y los polifenoles, que neutralizan los radicales libres, protegen contra el daño celular y ayudan a prevenir el envejecimiento prematuro y enfermedades crónicas.

• Efecto antiinflamatorio: los compuestos fenólicos presentes en el aceite de oliva combaten la inflamación, lo que puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades crónicas como la artritis y las enfermedades cardiovasculares.