Pluralismo y mayor presupuesto, dos claves de la cultura macrista que se viene

Más allá de que Mauricio Macri durante la campaña no haya sido lo suficientemente concreto en términos de su política cultural hacia futuro; algunas declaraciones y sobre todo su gestión como Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, muestran algunas pistas del camino que tomará el presidente electo en este terreno.
En el primer término, el líder de Cambiemos siempre ha buscado diferenciarse de la cultura kirchnerista haciendo hincapié en la apertura ideológica de su administración, y como ejemplo de esto pone sobre la mesa las grillas del Canal y la Radio de la Ciudad, donde conviven todo tipo de programas y periodistas, así como las contrataciones de artistas claramente identificados con el gobierno saliente, incluyendo Fuerza Bruta, la agrupación encargada de animar los festejos del Bicentenario que se presenta actualmente en el Centro Cultural Recoleta.
Es de suponerse que estas directivas se extiendan ahora hacia los medios de comunicación administrados por el Estado nacional, como la actual Televisión Pública, Radio Nacional, etc, donde los últimos años fue difícil encontrar una voz discordante.
En lo que tiene que ver con el espacio público, con Hernán Lombardi a cargo del Ministerio de Cultura porteño, y uno de los candidatos más firmes a ocupar esa cartera a nivel nacional, Buenos Aires se destacó fundamentalmente por la restauración de viejas y abandonadas estructuras y por llevar el arte a las calles, convirtiendo estas políticas en los pilares del mandato del PRO en los últimos ocho años.
El Teatro Colón, el Anfiteatro del Parque Centenario, el Museo de Arte Moderno, la Usina del Arte, el Polo Bandoneón son algunos ejemplos de lo primero. Y en cuanto a las actividades, además de continuar con importantes eventos clave y muy arraigados en la Ciudad como el Bafici, el FIBA, el Festival de Tango, y el Festival de Jazz, se agregaron a la oferta el Festival de Circo, o la Ciudad Emergente para los Jóvenes. Además se debe anotar en el haber la ampliación de la Noche de los Museos, a la que se sumaron la Noche de las Librerías, la Noche de las Disquerías, y la Noche de la Filosofía, con gran éxito.
En relación al presupuesto del área, en la previa de las elecciones del 25 de octubre, Lombardi había manifestado que como ministro del distrito capital contaba con un presupuesto de
$ 2800 millones, mientras que el Ministerio de Cultura de la Nación cuenta con $ 2200 millones, algo que según sus palabras "Es inaceptable". Estas declaraciones suponen que a partir del año que viene puedan aumentarse los fondos para el sector, más una "potente" descentralización de esa partida. Durante un debate con Jorge Telerman, referente cultural de Daniel Scioli, Lombardi afirmó que debe incrementarse el presupuesto del área en un 3%, sumado a un mucho mayor fomento de la cultura en las economías regionales. Es una incógnita lo que ocurrirá con las industrias del cine nacional o editorial, que se hicieron muy fuertes y contaron con gran soporte de la gestión anterior.
Por otra parte, si fuera por Lombardi, habría que cambiar el nombre al Centro Cultural Kirchner y cerrar la Secretaría de Coordinación del Pensamiento Nacional, que tenía a su cargo Ricardo Forster. No hay definiciones sobre el futuro de Tecnópolis, que podría continuar, pero sin "línea editorial".
Los referentes políticos de la Cultura nacional serán el mencionado Hernán Lombardi (que también podría ir a Turismo donde tiene vasta experiencia), Darío Lopérfido, actual director del Teatro Colón (ambos ex Grupo Sushi); Pablo Avelluto (Grupo Manifiesto), diputado recién electo para el Parlasur y coordinador del Sistema de Medios Públicos de la Ciudad; y Alejandro Gómez, subsecretario de Gestión Cultural porteño, quien por otra parte podría recalar como presidente del Instituto Cultural de la provincia de Buenos Aires.
Sobre su vínculo con los artistas populares, Macri va a tener que ganarse su apoyo a fuerza de gestos y actitudes, en su mayoría vinculadas a lo económico. El ex intendente no ha recabado demasiadas muestras públicas de respaldo por parte del gremio, salvo excepciones como Juan José Campanella, Mirtha Legrand, Susana Giménez, Luis Brandoni, Raúl Lavié, Martín Seefeld, Adrián Iaies y Mauricio Wainrot,que no es poco pero no es suficiente. Con Marcelo Tinelli, el ex presidente de Boca mantiene una relación ambigua que tienen que ver más que nada con asuntos vinculados al fútbol, ya que hubo algunos desencuentros por el regreso de San Lorenzo a Boedo, aunque el Banco Ciudad es el sponsor de la camiseta del club y cuenta con una tarjeta de crédito temática de esa misma entidad.
Macri cuenta también con el acompañamiento de pensadores y escritores como Juan José Sebreli, Santiago Kovadloff, Marcos Aguinis, Marcelo Birmajer, Federico Andahazi, y Alejandro Rozitchner, entre otros.