Kevin Johansen: "Me hubiera gustado que Daniel Scioli estuviera en el debate"
El cantante critica el polémico "faltazo" del candidato presidencial del Frente para la Victoria (FPV) y considera "algo nocivo" la grieta que divide a la sociedad argentina. Sostiene que, como artista, también se hace política a través de las canciones y afirma que el país tiene todo "para romperla".
Hace 51 años, Kevin Johansen llegó al mundo y no fue la Argentina su país de nacimiento sino los Estados Unidos, más precisamente el frío estado de Alaska. Dueño de dos nacionalidades (su madre es argentina y su padre norteamericano), vivió hasta los 11 años en San Francisco y un tiempo después, entre 1990 y 2000, Nueva York fue su lugar de pertenencia. Hoy reconoce que Buenos Aires es su gran amor: "Estoy afincadísimo acá, es mi ciudad en el mundo".
Su sociedad de canciones dibujadas con el reconocido dibujante Liniers ya es un clásico de la escena musical porteña.
Además de adelantar el lanzamiento de su próximo disco, Johansen se anima a hablar de política y nos pone a ciudadanos y dirigentes en la misma bolsa: "Todos estamos teñidos de corrupción, no sólo los políticos".
¿Cómo te llevas con la política?
- Siempre recuerdo una frase de Aristóteles que citaba mi mamá, que decía que el hombre es un animal político. Todo es política, no podemos escapar de eso.
Si todos somos animales políticos, ¿desde qué lugar la ejercés?
- Evidentemente desde lo artístico se puede hablar mucho, uno no está exento. John Lennon con sus canciones cambió muchas cosas en el mundo. Creo que desde la música se puede hacer política, se puede opinar, intentar transformar cosas, criticar y, de algún modo, lo intento. Soy de la generación de la primavera de la democracia, nuestros padres por escribir una canción eran amenazados, censurados o asesinados. Yo no puedo cantar acerca de las mismas libertades que cantaban Joan Manuel Serrat, León Gieco o Víctor Jara hace 40 años.
Hablaste de libertades en 2010 con Liniers y tu banda The Nada cuando tocaron frente al Congreso el día que se aprobó la ley de matrimonio igualitario
- Fue una forma impensada e inesperada de hablar de política y dar mi opinión. Fue muy bueno y me cayó la ficha de que canto sobre nuevas libertades a conseguir.
¿Barajaste la posibilidad de que se te etiquetara políticamente por participar?
- Sí, es algo muy nocivo todo lo que se generó alrededor de la grieta, es algo muy básico que existe a nivel universal, no está sólo en este país. Acá tenemos la famosa grieta, o Juez Grieta en vez de Griesa.
¿Se perdió la esperanza por la política?
- Uno a veces termina siendo cínico, lamentablemente, cayendo en un escepticismo respecto de la política en general, viendo que todos se están peleando por la caja. Todo está disfrazado de defender tal o cual ideología y en realidad por debajo hay una lucha por el dinero, y eso a mucha gente la desencanta.
¿En año de elecciones el clima político invade el resto de los ambientes?
- Se habla mucho de la corrupción y considero que todos estamos teñidos, no sólo los políticos. Quizás ellos son los más expuestos porque manejan más dinero, son lo que tienen más poder. En realidad, la sociedad es muy corrupta en muchos niveles.
Ricardo Montaner compuso el jingle de campaña de Daniel Scioli. ¿Te animarías a hacer uno si te lo propusieran?
- Tendría que estar muy alineado con la persona, o conocerla mucho como para hacer algo así, no me sería fácil. El candidato debería tener algo que realmente apoyo, si bien Scioli no es un tipo que me caiga mal, considero que es algo muy personal.
Viviste de cerca el caso de Juan, el chico que en un móvil de televisión se declaraba fanático de Liniers y tanto en los medios de comunicación como en las redes sociales se generaron muchas burlas
- Sí, lo conocimos a Juan en Bahía Blanca. Siempre machaco con la idea de celebrar las diferencias y no padecerlas, el bullying es eso, no celebrar al diferente y hacer que sobresalga negativamente. Liniers y yo luchamos contra esas cosas.
¿Hace falta alguna medida a nivel estatal para combatir el bullying?
- Se ve un esfuerzo por encontrar empatía en el fútbol, por ejemplo, y el hecho de tener la hinchada visitante volviendo a las canchas es un símbolo para el resto de la sociedad, hay que respetar al que piensa distinto y al que tiene la camiseta del rival. Me pareció brillante que el Papa Francisco se animara a decir que las murallas no sirven para nada sino que hay que hacer puentes, cuando Donald Trump dijo que había que hacer una muralla entre México y los Estados Unidos. Francisco dio muchos mensajes en su gira, pero después también te enterás del caso de un cura gay que lo expulsaron de la Iglesia, y me da lástima porque tenían la chance de reconocer otras cosas, como que por tu sexualidad no puedas ser un buen cura, por ejemplo. Es otro tema a debatir, hablando de las nuevas libertades.
¿El debate presidencial fomentó una apertura al diálogo?
- Sí, pero me hubiera gustado que Daniel Scioli estuviera en el debate, por más que me gusten algunas cosas de las que presenta. Ojalá puedan hacer otro y que estén todos.
¿Qué esperás del próximo gobierno?
- Que siga lo que está bueno y que se corrija lo que no. Es un país que la tiene que romper, tenemos todo para romperla: un Papa argentino, a Máxima Zorreguieta y a Lionel Messi, dejémonos de joder.